¿Qué, estaban esperando la actualización de hoy? Es que sino, no me explico como 78 personas han entrado hoy sin haber actualizado. Ansiosos!
Hace exactamente 24 horas que me estaba pintando la cara con motivo de la noche de Halloween. La economia esta muy mal para andar comprando disfraces asi que para intentar salvar la noche y dar el pego, me pinte la cara. Un poquito de sangre, unos polvos blancos y ojos negros. Y a las 22:00 todos listos para ir a la discoteca Vega en Copenhague. Discoteca que cumple la premisa de: “cuanto más esperes de una fiesta, más decepción te llevarás”. Matizo, no estaba mal, simplmente la sala era pequeña y axfisiante, te cobraban 10 euros por entrar, la música a veces dejaba que desear y entre españoles y gente de Korallen encontrar un no-conocido era casi misión imposible. Y es que claro, se pregunta la gente por qué algunos robamos y estafamos al Estado, sin embargo, la pregunta es por qué Dinamarca intenta estafarnos a nosotros.Es decir, te cobran 50 DKK por entrar y luego tienen un servicio de ropero que no es optativo sino que te obligan a dejar el abrigo. Entonces me pregunto ¿Quién copjones sale en este puto país, con sus 11 grados de media todo el año- sin abrigo? Conclusión: 3 euritos que te roban por el ropero. Pero aun no he terminado ya que si creia que ese podía ser el mayor robo de la noche es porque no había pasado todavía dentro y pedido una cerveza. En esos casos ya no te duele la puñalada en el corazón sino la cara tonto que te ve el camarero cuando contesta que cuesta 45 DKK (casi 7 euros). La cerveza. El mini-cubata ya ni me atreví a preguntarlo. Sutilmente, tras asimilar que no has escuchado mal y son 45 DKK, le sueltas que prefieres no beber porque seguramente que le acabarás vomitando. Encima de él, claro.
Quitando todo eso, la discoteca por lo demás estaba muy bien. MUY IMPORTANTE: nunca pierdan la dignidad con el pretexto de “aquí no me conoce nadie”. Es un mito falso. Atentos a la conversación:
– Yo: Si, aquí puedes fumar, nadie dice nada
– Ella: Yo a ti te conozco.
– Yo: Puede ser, de algún día de fiesta
– Ella: No, del colegio. Tu ibas al Santa María de la Hispanidad. tenías de profesores a Pilar, Sebas, José María…
– Mi reacción => Helado. Han pasado 7 años. ¿No he cambiado nada? Yo creo que el fallo fue el disfraz.
Una chica lo definió muy bien: me voy porque ya está todo el folleteo servido. Si este blog hablase sobre lo que vió ayer…
Aún así sigo maldiciendo la hora en que me dejé convencer por un andalú de acento cerrado y n valenciano con ojos de cuervo, para irme a dormir. Era la 1:30 y salimos varios de la discoteca. Yo les había intentado disuadir diciendo que aunque el tren pasase a las 2:07, no había metros para llegar a Central Station. Si perdiamos ese tren, no había otro hasta las 4:41 (no se olviden en lo que queda de relato de esa hora). Aún a sabiendas de que no había metro me fuí con ellos. Obviamente, no había metro. es más nos apagaron las luces a las 2:00 como señal inequivoca de que debíamos irnos. Pues ahí estábamos, en Enghave, en medio de la nada y con 3 posibilidades: ir a Valby St, ir a Copenhague Central Station o volver a la disco. Escogimos la primera. Caminata de 20 minutos hasta la estación de Valby. Decían que estaba más cerca que la Estación Central, cosa que sigo dudando, peor lo que si estaba era una zona más muerta. Tras el aprovisionamiento en el Seven Eleven, llegamos a Valby a las tres menos algo. Cerrada. Discutiendo andábamos sobre qué debíamos hacer cuando un grupo de españoles de Korallen llegan y descubren la misma situación. La mitad del grupo, tras una larga negociación, coge 2 taxis (80 DKK por persona. Eran 5) y se marchan. Eran las 3:15, nos encontrábamos en media de la nada y el tren pasaba en hora y media. Como verdaderos homeless entramos en la estación a través de los andenes y … a dormir.
Cada uno escogió banco, suelo o apoyado en otro pero el caso es que una hora nos quedamos todos dormidos. La estampa era digna de admirar. Finalmente llegó el tren y cogimos rumbo para Trekroner. Al bajarnos de la estación nos reencontramos con todos los Erasmus que se habían quedado de fiesta en Vega. Patético.
Moraleja: 1- Guiate por tu intución y si te pegas una ostia, será que te lo tenías merecido. 2- No vayan de fiesta entre semana sino quieren volver antes de las 5:15 a casa. 3- En Halloween lo único terrorrífico que sucedió fueron los ronquidos de cierta persona en la estación. 4- Los planes imprevisto son los más emocianante y los que recuerdas siempre.
VALBY. Anterior domingo: expulsado del tren. Este domingo: durmiendo en un banco. ¿Próximo domingo?
PD: Había escrito esta entrada en otro blog y llevaba más de 15 min dandole vueltas sobre por qué no me aprecía en mi blog. En fin, a dormir